Así lo aseguró el presidente de la tienda, Arturo Squella. Los 22 consejeros electos conformaron un “comité de instalación” de cara al inicio de su trabajo.
Ayer finalizó, en Casablanca, la jornada que el Partido Republicano organizó para que sus consejeros constitucionales electos fijen una línea de trabajo, de cara al inicio del trabajo del Consejo Constitucional el próximo 7 de junio.
Una de las primeras definiciones que tomó la colectividad fue definir un “comité de instalación”, instancia de la cual no se dieron mayores detalles, pero que tendría por objetivo facilitar la coordinación y los roles de cada representante en el órgano redactor.
“Queremos demostrar a Chile que asumiremos con responsabilidad la misión que se nos ha encomendado”, dijo Luis Silva, electo como primera mayoría nacional en la Región Metropolitana, quien estuvo acompañado de Beatriz Hevia, representante de Los Lagos, quien obtuvo más de 100 mil preferencias. Los 20 consejeros los flanquearon en la declaración entregada, la cual no tuvo espacio para preguntas.
En la tienda, además, han rehusado transmitir cuáles serán las propuestas que defenderán durante el proceso de redacción del borrador constitucional, ya que la prioridad sería lograr un consenso en aquellas materias en que exista mayor “transversalidad”.
El presidente del partido, Arturo Squella, señaló, eso sí, que una de las prioridades de la tienda es “corregir las dificultades del sistema político”, y que “más que entrar nuevamente a entramparnos en la discusión del catálogo de derechos fundamentales, como lo fue en la Convención pasada”, el nuevo proceso “es una gran oportunidad para avanzar en materias que sean más transversales y que no tengan barreras o confrontamiento ideológico, como la descentralización y la modernización del Estado”.
Squella, además, tuvo que volver a referirse a la situación de Aldo Sanhueza y Carlos Solar —consejeros constitucionales electos por las regiones del Biobío y Antofagasta, respectivamente—, quienes se vieron involucrados en acusaciones de índole sexual. Ante esto, Sanhueza, quien fue formalizado en marzo de 2019 por “graves ofensas al pudor”, decidió renunciar al partido para no “involucrarlo” en su proceso de defensa.
Frente a las peticiones de renuncia que surgieron desde agrupaciones feministas del Frente Amplio, Squella expresó que “las personas pueden pedir lo que estimen pertinente, pero tal como lo hemos dicho no es algo que competa a nosotros en el momento que materializa su renuncia”.
Con Solar, a quien se le acusa de supuesto acoso sexual, la respuesta fue distinta, ya que el partido le entregó su apoyo ante lo que consideran una acusación que se dio bajo “lógicas electorales”.
Junto a Silva, Beatriz Hevia indicó que volverán a tener jornadas conjuntas y que, además, lanzarán una plataforma en que la sociedad civil pueda dar a conocer sus ideas, ya que “será muy importante para nosotros la participación ciudadana”.
Desde la tienda confirmaron que durante el proceso de instalación y cuando comience a sesionar el Consejo, y al margen del apoyo técnico que como partido puedan entregar a sus representantes, un grupo de exconvencionales también estará entregando su asesoría.
Rocío Cantuarias, Pollyana Rivera, Martín Arrau, Ruth Hurtado, Cecilia Ubilla (UDI), Bernardo Fontaine (ind. RN) y Marcela Cubillos (ind., exmilitante UDI) se habrían mostrado disponibles. Cubillos, por su parte, ha insistido en distintas ocasiones en la necesidad de que el sector trabaje de manera mancomunada en el Consejo Constitucional.
